(Bloomberg) Los accionistas mayoritarios de Manchester United , la familia Glazer, con sede en los Estados Unidos, anunciaron planes de vender 8 millones de acciones, o sea un 5% del equipo de fútbol con un récord de 20 campeonatos ganados, en una oferta pública.
La venta de las acciones Clase A dejaría a los Glazer, que también son dueños de los Tampa Bay Buccaneers de la National Football League, con un 85% del club que compraron por medio de una compra apalancada de la participación mayoritaria por 790 millones de libras (US$1,400 millones) en 2005.
Los Glazer recaudaron US$233 después de una oferta pública inicial de 10% del club en la Bolsa de Nueva York en 2012.
United se propone recuperarse de su peor temporada en la Premier League, después de haber terminado séptimo sin llegar a la Champions League de elite. Comenzará una segunda temporada consecutiva con un nuevo entrenador después de contratar a Louis van Gaal para reemplazar a David Moyes, que fue despedido después de una temporada.
Los derechos de voto de las acciones que venden los Glazer equivalen a una fracción de sus acciones Clase B, que tienen 10 votos por acción en comparación con las acciones Clase A que otorgan a sus propietarios un voto.
La venta es manejada por Jefferies, Bank of America Merrill Lynch, Credit Suisse Securities, Deutsche Bank Securities y Nomura Securities International. Los agentes colocadores tienen la opción de comprar 1.2 millones más de acciones, según una nota de prensa publicada anunciando la venta.
Al precio de cierre del 30 de julio, la venta de los 8 millones de acciones se traduciría en unos US$150 millones para la familia.
Muñeco quemado
Los Glazer nunca fueron populares entre los simpatizantes del equipo, que no tenía deuda antes de que ellos compraran el club. La compra de la participación mayoritaria fue financiada con 374 millones de libras de préstamos bancarios y 275 millones de pagarés vendidos a fondos de cobertura. Los hinchas quemaron un muñeco con la figura de Malcolm Glazer , el fallecido patriarca de la familia, frente al Old Trafford, el estadio del equipo.
No obstante, hasta hace poco tiempo, United conoció un período exitoso, con cinco títulos de la liga y una Copa Europea, gracias al entrenamiento de Alex Ferguson, el escosés que guió al equipo durante 27 años hasta que se retiró en 2013. Desde la compra, se han gastado casi 700 millones de libras en pagar la deuda vinculada a la propiedad del club.
La deuda se redujo hasta unos 350 millones de libras, en tanto los ingresos crecieron gracias a mejores contratos televisivos negociados en razón del atractivo que tienen la Premier League y Manchester United para los patrocinadores. La marca Chevrolet de General Motor aparecerá en la camiseta del club por primera vez esta temporada a raíz de un acuerdo por US$559 millones firmado en 2012.
Este mes, Adidas aceptó pagar US$1,300 millones por el derecho a producir indumentaria para United, incluida su camiseta, durante 10 años.
United reveló a los posibles accionistas que su acuerdo de auspicio con Adidas tiene una cláusula ligada al desempeño que reduciría el monto anual pagado por los artículos deportivos de la empresa en un 30% desde US$131 millones hasta US$89 millones si United no llega a la Champions League en dos temporadas consecutivas.
“Nuestro éxito y numerosos logros durante los últimos 20 años no necesariamente significan que continuaremos siendo exitosos en el futuro, ya sea por cambios en el plantel de jugadores, el personal de entrenamiento o alguna otra cosa”, dijo United en el prospecto de las acciones. “Una caída en el desempeño de nuestro primer equipo podría afectar adversamente nuestra capacidad para atraer y retener a entrenadores y jugadores”.
Actualmente, United realiza una gira por los Estados Unidos como parte de un entrenamiento pretemporada con nuevos integrantes del equipo como Ander Herrera y Luke Shaw. Los Red Devils lograron un empate 0 a 0 con el Inter Milan, esta semana, en Washington antes de ganar por penales.
