Una hamburguesa de siete pisos y preparada por un miembro de la familia real de Qatar se ha convertido en una de las más caras del mundo. La fundación Pink Caravan, que busca generar conciencia sobre el cáncer de mamas, organizó una subasta en Dubái donde se remataron tres hamburguesas más y otros platos de comida. En total, la organización recaudó casi US$ 30.000.
El costoso emparedado fue comprado por Asma Al Fahim, fundador de la revista Villa 88, quién desembolsó US$ 10.000. La hamburguesa no solo tiene siete capas de carne —que representa a cada uno de los Emiratos Árabes— sino también queso cheddar envejecido, tiras de tocino y pan con azafrán.
Además, fue cocinada por Russell Impiazzi, director culinario de un importante recinto de la ciudad, con la ayuda del Sheikh Mohammed bin Abdullah Al Thani, quien es miembro de la familia real de Qatar.
“En 2015, rompimos un récord al vender una hamburguesa por US$ 7 mil y este año quisimos superar esa meta”, declaró este último en un comunicado.
El Mercurio
