(Bloomberg) Anthony Levandowski perdió su trabajo en Uber Technologies Inc. y un posible pago por US$250 millones.
Levandowski, de 37 años, que fue despedido el martes de la compañía con sede en San Francisco, consiguió 5.31 millones de acciones cuando fue contratado en agosto.
La concesión fue en base a su servicio continuo y el logro de ciertas metas de rendimiento. Levandowski fue contratado a voluntad y ninguna de las acciones le habían sido conferidas cuando se fue, según un ejecutivo de Uber familiarizado con el asunto.
“Estos premios en realidad están destinados a retener a los empleados, y cuando los servicios de un empleado ya no son necesarios, los premios suelen perderse en virtud de la voluntad de empleo”, dijo Shane Tucker, un socio de Vinson & Elkins especializado en la remuneración de ejecutivos y beneficios.
La terminación pone fin a la breve y dramática temporada de Levandowski en el gigantesco servicio de transporte que adquirió su compañía Otto, una startup de camiones autónomos que el formó después de dejar Waymo de Alphabet el año pasado.
Muchas empresas de tecnología, como Apple, Alphabet y Facebook, normalmente no firman contratos de trabajo con altos ejecutivos. Esto significa que las acciones no invertidas se pierden si éstos salen o el contrato se termina.
Si Levandowski tuviera un contrato de trabajo, Uber podría haber sido obligado a darle el premio si el despido fue injustificado -es decir que no hubiera violado ningún término del contrato o se hubiera comportado de una modo que fuera motivo para una terminación.
Uber dijo que despidió al ingeniero porque no cumplió con una investigación sobre el presunto robo de la tecnología automotriz de Alphabet.
La valoración de US$ 250 millones fue citada en un caso judicial por Waymo, el desarrollador de la tecnología de automóviles autónomos, donde Levandowski trabajó antes de fundar Otto.