El ‘sur chico’ vive un auge en la construcción desde hace algunos años. Especialmente, el balneario de Asia, donde la tendencia apunta a edificios y proyectos multifamiliares que permiten reducir costos y espacios.

Si bien a estos se les exige mantener la misma apariencia externa, blanca y lineal, en su mayoría, la decoración y la distribución del interior dependen plenamente de los gustos de los propietarios.

Y el sello en casas de playa para el verano 2017 es el minimalismo y los detalles en piedra en espacios compartidos, como salas, cocinas, terrazas y piscinas.

“La tendencia en la arquitectura de las casas de playa es minimalista y contemporánea, donde materiales en bruto, como el concreto, el ladrillo y la piedra, juegan un papel muy importante como parte de la decoración”, explica María Carolina Vidales, gerente de BoConcept.

En tanto, Giuseppina Cánepa, directora ejecutiva de Arq Studio, recalca la función de estos elementos: “La imitación de piedra y madera en porcelanato se usará mucho en pisos y revestimientos, por su practicidad y su cercanía a la naturaleza”.

Color y detalle
Los tonos blancos y grises continuarán siendo la base de la decoración en las casas de playa. Sin embargo, la tendencia en el verano es a que contrasten con verdes, azules y rojos, sobre todo en muebles de las salas y terrazas.

“El blanco da frescura y amplitud a los ambientes, pero los acentos en rojo y naranja dan alegría usados con moderación”, indica María del Carmen Delfino, docente de Arquitectura de Interiores de Toulouse Lautrec.

Además, los espacios compartidos pueden lucir detalles de madera en carpintería, estampados florales, vidrios amplios que aporten brillo y elegancia, plantas reales, muebles de mimbre, cojines de colores y esculturas.