Diana Mujica Maguiña
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Sus abuelos y bisabuelos no han cambiado su rutina diaria. Haciendo gala de la flema inglesa, el Príncipe Carlos ha seguido su agenda de viajes y la Reina Isabel II ha atendido cada reunión.
Pero si desde su familia la tradición se ha seguido a rajatabla, desde el ala mediática, el hijo de los Duques de Cambridge, tercero en la línea de sucesión al trono inglés, ha tenido toda la cobertura que solo un famoso sueña con tener.
Y finalmente, tras una semana y un poco más de retraso según las cuentas de las casas de apuestas, el heredero ha nacido.
“La duquesa Catalina, de 31 años, ha dado a luz a las 4:24 (hora de Londres) en el hospital de St. Mary’s a un niño que ha pesado 3,798 kilos”, ha confirmado la Casa Real cuatro horas después del parto.
Retraso monetario
La mayoría de casas de apuestas y medios de comunicación daban por sentado que la duquesa empezaría su cuenta regresiva el 13 de julio. Esa semana de diferencia se ha traducido en una pérdida de US$ 153 mil para las casas de apuestas. Según las casas de apuestas, hasta ahora se ha invertido un total de US$ 2,1 millones en apuestas sobre el nacimiento, una cifra que solo se lograba en partidos de fútbol. Tal es el furor del bebé real.
Negocio familiar
Y nadie quiere quedarse fuera del negocio. Según los calculos de varias consultoras, el cálculo promedio, millones más, millones menos, es de US$ 420 millones en merchandising y negocios relacionados con el heredero. Y en esta pugna por sacar unos millones no se libra nadie. Ni la empresa privada, que ha lanzado de todo, hasta la misma Casa Real, que llega incluso a tener bolsas para vomitar oficiales con el logo del bebé.
Y si de hacer caja chica en la familia se trata, el abuelo paterno, Carlos, no se ha quedado corto. Ha lanzado los zapatitos hechos a mano y los sombreritos comercializados a través de su “marca” Highgrove.
Y los abuelos maternos han ido más allá y ya anunciaron que su compañía especializada en productos para fiestas infantiles, Party Pieces, lanzará varias promociones temáticas alrededor del ‘royal baby’.
Y así continuará. Tan solo el rumor de que Kate compró un carrito azul de la marca Bugaboo ha disparado un 13% las ventas de esa marca.
CIFRAS Y DATOS
Impulso. Según la consultora KPMG, la boda real de los duques de Cambridge en abril de 2011 empujó el gasto de los británicos un 7%.
Cuentas. Según el Centro para la Investigación de Venta al Por Menor, los británicos y los turistas se gastarán estos días US$ 96 mlls. solo en souvenirs del bebé real.
Pijama. La Royal Collection Trust ha lanzado la casa por la ventana con el pijamilla para niño de guardia real.
Brindan. US$ 108 mlls. se gastarán los ingleses en champán y en espumantes para celebrar el nacimiento de su heredero.
