(Bloomberg) Twitter se ha convertido, oficialmente, en una piñata. Los inversores están atacando su modelo de negocio, el precio de la acción e incluso la propia razón de su existencia.

Dada las estrategias imprevisibles de Twitter y los frecuentes cambios de su equipo directivo durante años, puede que parte de esto haya sido inevitable. No obstante, Twitter cuenta con una gran audiencia, proporciona un servicio que gusta a sus usuarios y, bueno, quizás no está tan mal.

Para poner a prueba esta idea comparemos Twitter con Facebook, el actual Rey del Sol en el mundo de las redes sociales.

Todo pero todo el mundo está en Facebook. Los indicadores del desempeño de la compañía son envidiables. Twitter cuenta con una quinta parte de los usuarios de Facebook y está teniendo dificultades para encontrar sangre nueva.

Facebook es un monstruo de los ingresos mientras que el crecimiento de ingresos de Twitter se ha desacelerado.

Pero ¿cómo son las compañías y sus plataformas en comparación una con otra? Los usuarios de Twitter tienden a ser más jóvenes y de un espectro más diverso que Facebook; también tienen un mayor nivel adquisitivo, una mejor educación y es más probable que vivan en áreas urbanas.

Desde el punto de vista de la publicidad, este es un segmento de individuos bueno al que conocer.

Twitter también se lleva bien con los medios, y atrae a usuarios con un abanico más amplio de contenidos de noticias que Facebook.

A los usuarios de Twitter les gusta seguir acontecimientos en directo y obtener actualizaciones de noticias en este sitio web, entre otras cosas.

Pero esto, en última instancia, es un segmento de usuarios altamente específico y no genera la lealtad de masas de la que disfruta Facebook.

Las ofertas a un nicho de mercado son más difíciles de rentabilizar en cifras espectaculares justamente por eso, porque se trata de un nicho de mercado.

Pero las ofertas enfocadas a nichos de mercados pueden tener valor y hacer dinero si se gestionan de una manera efectiva. La escala de Facebook es colosal, pero puede que las redes sociales no terminen siendo monolíticas.

Con la evolución de la audiencia de las redes sociales es posible que lealtad se quiebre, abriendo más la puerta a los competidores de nicho.

Abundan los ejemplos de redes sociales que son populares entre ciertos grupos demográficos: Pinterest (mujeres), Snapchat (adolescentes), LinkedIn (profesionales), Neopets (niños y, curiosamente, gente que solía ser niños).

Hay medidas importantes en las que resulta difícil comparar Twitter y Facebook con los datos disponibles. Twitter dice que se envían cientos de millones de tuits todos los días, mientras que Facebook prefiere hablar del tiempo que un usuario permanece en su sitio web ya que, según opina, la mayor parte de los usuarios de plataformas sociales tienen un carácter pasivo.

Por su parte, Facebook dice que tiene algo más de 1,000 millones de usuarios activos al día. Twitter no ha querido proporcionar cifras comparables. De la misma forma, resulta imposible comparar los “me gusta”, los retuits o el “compartir”.

Puede que la salvación para Twitter sea que no intente seducir a todo el mundo. La red social podría poner orden en casa, prestar atención a sus resultados y centrarse en servir a los usuarios que ella tiene, y Facebook no.