La etapa laboral de una persona es una de las más largas en la vida. Entonces, ¿por qué no vivirla de la mejor manera? Una forma de hacerlo es previniendo riesgos al adquirir un seguro adecuado a su profesión.
La mayoría de los accidentes ocurren en horas laborales, por lo cual una buena forma de protegerse es con un seguro de accidentes personales, comentó Alex Rizo, vicepresidente de Seguros de Accidentes y Salud de Pan-American Life Insurance Company.
“Todo mundo, no importa su actividad, está expuesto a accidentes y todo mundo merece protegerse”, y agregó que la tasa de accidentes en México no ha mejorado en los últimos diez años.
Además, una póliza por accidentes personales es más económica que una de vida, es una puerta de entrada a la cultura de la prevención.
Cobertura en su trabajo
La pertinencia de este producto radica en que tiene un enfoque laboral. La evaluación del riesgo que corre una persona y la prima que paga están relacionadas con el trabajo que realice.
Los trabajos se dividen en tres grupos, según su riesgo. En el nivel más bajo —tanto en riesgo como de costo monetario— están los trabajos de oficina.
El segundo nivel está conformado por trabajos que implican movilización constante, como un vendedor. El riesgo sube porque la gente se expone a accidentes de tráfico, los cuales comúnmente están en el top tres de siniestros, comentó Rizo.
Finalmente, están los trabajos en construcción o en fábricas, que tienen el mayor riesgo dentro de lo común. Otras labores, como ser buzo industrial o estar en una plataforma petrolera conllevan pólizas particulares.
También son tres las principales coberturas que ofrecen estos seguros: muerte accidental, pérdidas orgánicas e incapacidad.
La distinción de esta póliza, comenta Rizo, es que “el pago no se le hace al hospital, se le da al asegurado para que éste maneje sus gastos adecuadamente”, porque un accidente abarca más que los gastos médicos, que tiene su póliza específica.
Por ejemplo, en un accidente de una madre trabajadora, además de la hospitalización habría que considerar el costo de la transportación, la ayuda con la casa y los niños, la rehabilitación y la ausencia en el trabajo. “En estas cosas, las coberturas de incapacidad o pérdida orgánica pueden ayudarle a superar el trauma físico y financiero”, explicó.
Compare y elija
Hay tres puntos que comparar para encontrar su seguro indicado. Primero debe revisar las exclusiones en la póliza. Éste es el filtro más ligero, pues la mayoría de las exclusiones son casi iguales, opinó Rizo.
El diferenciador más importante es la calidad en el servicio: cómo se paga y la rapidez del pago.
Normalmente, tras la ocurrencia del siniestro y la evaluación de la aseguradora, debe haber respuesta en dos o tres días.
Un tercer diferenciador sería el espacio de la cobertura, pues hay quienes ofrecen pólizas internacionales que lo cubren en todo el mundo.
El léxico
de los seguros
Cualquier seguro viene con su lenguaje específico. Para analizar y comparar el producto que le ofrezcan, debe manejar estos conceptos:
- Cobertura: son los riesgos específicos frente a los cuales el seguro lo protege. Siempre que se produzca el siniestro, el asegurador está obligado a entregar al asegurado determinada cantidad de dinero, conocida como suma asegurada.
- Póliza: es el documento que contiene las normas generales, particulares y especiales que regulan la relación entre usted y la aseguradora.
- Suma asegurada: es el monto máximo que le pagaría la compañía de seguros en caso de pérdida o daño
- Prima: es el costo del seguro, es decir, la suma que pagas periódicamente por estar protegido.
El costo de no prevenir
Los accidentes siempre son trágicos, pero su impacto se puede reducir con la cultura del seguro.
Diario El Economista de México
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)
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