¿Qué deberían proponer los candidatos presidenciales para mejorar el proceso de descentralización y la gestión de los gobiernos regionales?

El economista Carlos Casas expresó que, a nivel institucional, se debe fortalecer el ente rector de la descentralización y dotarlo de “uñas” para que pueda impactar en las gestiones regionales, centrándose en lo técnico y dejando de lado los políticos.

“Existía un Consejo Nacional de la Descentralización, que hizo un mejor papel que lo que ahora hace la Secretaría General de Descentralización, que ha quedado totalmente relegada y nadie le hace caso y que en todos los problemas, no tiene una voz”, explicó el exviceministro de Economía.

“Hay que subir un poco más de nivel y que tengamos ‘más uñas’ en el sentido de poder hacer que los sectores coordinen porque los mismos sectores son los que ‘quitan el cuerpo’ y no quieren afrontar el problema de la descentralización porque lo ven complicado, confuso y ahí está justamente el centro del problema”, agregó.

En cuanto a mejorar la capacidad fiscal de los gobiernos regionales, el catedrático de la Universidad del Pacífico recalca la necesidad de crear una cultura de evaluación de la calidad del gasto en las regiones, que conlleva en la liberalización de los recursos para poder implementar obras públicas.

El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) tiene equipos técnicos que, precisamente, tienen por objetivo mejorar las capacidades de los gobiernos regionales para ejecutar su presupuesto.

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“Las oficinas Conectamef tiene algunos equipos itinerantes, pero generalmente la autoridad tiene que ir hasta la capital del departamento para que le resuelvan el problema. El énfasis de la capacitación está en darle cursos. En un fin de semana, se les reúne, se les da como 20 horas de conocimientos que es imposible que asimilen”, sostuvo.

El catedrático de la UP insiste en que se debe trabajar permanentemente y directamente con las regiones y sus autoridades locales.

“(Se debe) tener una línea abierta 24 horas al día, que les solucione el problema y se les escuche. A veces, es simplemente control de información, a veces no conocen bien cómo trabajar y, en segundo lugar, gente que vaya el campo, que trabaje con ellos y que resuelva el problema”, señaló.