La renuncia del ministro de Transportes y Comunicaciones, Martín Vizcarra, fue el momento más tenso del sismo político ocasionado por el informe de auditoría de la Contraloría sobre el contrato de concesión del Aeropuerto Internacional de Chinchero.
En la víspera, la Contraloría detectó responsabilidad penal por supuestas irregularidades en la adenda del contrato en un grupo de 10 funcionarios del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), y del Ositran.