Los beneficios que derivan de ayudar a otros
El hecho de compartir sus conocimientos y recursos pueden hacerle ganar algunos beneficios: posicionarse como líder del sector y, al mismo tiempo, garantizar la permanencia de su negocio.

Dé origen a defensores de la marca.
Usted puede cosechar valiosos defensores de su marca simplemente proporcionando ayuda donde se necesite ayuda. Digamos, quizá podría contratar a alguien para que sea el único responsable de proporcionarle ayuda a sus socios, a través de información valiosa, referencias, etc. Con eso, ganará una comunidad de defensores de su marca que podría favorecer el incremento de clientes potenciales.

Disminuya las barreras.
Cuando usted hace el esfuerzo de ayudar a alguien tiene la oportunidad de formar una relación signiticativa, que va más allá del lazo puramente transaccional. Una conexión estrictamente comercial quizá no dure demasiado, pero una más profunda, digamos, a causa de una retroalimentación mutua en materia de proyectos podría contribuir a generar confianza entre ambas partes. Esto facilitaría el hecho de llegar a un futuro acuerdo.

Aliente a los colaboradores a hacer lo mismo
Al ayudar a otros, usted le está dando un ejemplo a sus trabajadores. Esto significa que ellos estarán más dispuestos a ayudar a los clientes, lo que desemboca en una mayor satisfacción.

Si su marca puede cosechar una reputación basada tanto en amabilidad como en experiencia, usted tendrá más que un negocio rentable.

Cinco maneras de ayudar
Obviamente, hay muchas maneras de ayudar a sus socios y a otros personajes de la industria. Si está en busca de inspiración, a continuación conozca cinco maneras de demostrar su experiencia y capacidad de alimentar sus redes de contacto.

Reconózcalos.
Cuando usted tenga la oportunidad de reconocer a alguien, solo hágalo. Es decir, puede resaltar la excelente labor de algún colaborador en un artículo sobre ‘liderazgo de ideas’ o quizá puede hablar de una empresa en una conferencia de la industria.

Haga negocios a su manera.
Si alguien le pide que le sugiera un producto o servicio en particular, no dude en recomendar algún socio. Solo basta unos cinco minutos para buscar contactos en LinkedIn, y la persona que usted recomienda sólo podría devolverle el favor.

Ofrezca su tiempo.
Incluso las personas más ocupadas pueden dedicar parte de su tiempo a ayudar a otros. Quizá pueda ofrecer entrevistas a bloggers para poner en claro algunos de temas de interés. Si no es tan conocido, analice a qué personas podría llegar.

Comparta conocimiento.
Esta es la manera más fácil de ayudar, si no tiene una marca personal. Reconozca los problemas más comunes que tienen las personas y encuentre la manera más sencilla de atar cabos con el propósito de ayudarlas.

Brinde retroalimentación.
Con demasiada frecuencia las personas dicen lo que los demás quieren escuchar, pero pocas veces ofrecen una retroalimentación constructiva que realmente podría ayudar. No dude en elegir la alternativa más favorable: la crítica positiva.