Quizá esté tentado a incluir referencias que le parecen una experiencia valiosa, pero que resultan irrelevantes. Tampoco es bueno que pretenda ser excesivamente original ni quiera impresionar a un futuro entrevistador con aficiones extrañas.

Aunque en la entrevista de trabajo atender a los aspectos personales evita algunos errores en la selección, y ayuda a valorar si la persona encaja en la cultura de la compañía, no es necesario incluir en el CV características muy personales, como el número de hijos.

Asimismo, los errores gramaticales, la pésima redacción y las expresiones confusas no dicen nada bueno del candidato. No trate de impresionar al reclutador con literatura vacía y grandes palabras. Procure que no se le vaya la mano en tácticas para llamar la atención. Por ejemplo, no use fuentes tipográficas extrañas.

Calcule cuidadosamente los riesgos de incluir información de contacto no profesional. Si la dirección de correo que suele usar habitualmente es pepe@defarraestanoche.com quizá debería buscar otra para que un posible empleador contacte con usted.

Si además ha decidido dar pistas sobre su actividad en redes sociales, valore el uso que ha hecho de ellas. Tenga cuidado con las fotos o comentarios comprometedores en Facebook, por ejemplo. Para evitar ‘manchar’ su imagen, configure su privacidad.

Por último, nunca venda por encima de sus posibilidades. Las exageraciones y falsedades en los datos que facilite sobre su vida laboral es otro error. Si ha decidido correr el riesgo, tenga por seguro todo se desmoronará cuando tenga al frente al reclutador durante la entrevista.