(Reuters) El regulador bancario de Panamá anunció la intervención del Balboa Bank & Trust por sus nexos con la familia Waked, dueña de las tiendas libres de impuestos La Riviera y otras empresas que son investigadas en Estados Unidos por lavado de dinero y narcotráfico.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos incluyó a Abdul Waked Fares y Ahmed Waked Hatum en la llamada “lista Clinton”, señalados de utilizar sus sociedades en el comercio, la construcción y la banca para blanquear capitales del narcotráfico internacional.
“Esto pone en peligro los intereses de los depositantes toda vez que el prestigio del Grupo Bancario está en entredicho y una parte sustancial de los activos líquidos están colocados en jurisdicciones extranjeras sujetas a aprehensión por parte de las autoridades estadounidenses”, dijo la Superintendencia de Bancos de Panamá.
El Balboa Bank & Trust es una entidad menor propiedad del local Strategic Investors Group, que en el 2010 se hizo por US$ 15.5 millones con la liquidación de la filial en Panamá de Stanford Bank, cuyo dueño fue acusado de fraude por Estados Unidos.
Actualmente el banco, en el que Ahmed Waked Hatum aparece como tesorero, cuenta con cinco sucursales y 172 empleados, y tiene un capital de US$ 44 millones, según datos del sitio web del fiscalizador bancario.
Abdul Waked, presidente del Grupo Waked International SA (Wisa), compañía matriz de los negocios de la familia con 40 años en Panamá, emitió un comunicado en el que dijo que “estos señalamientos son falsos e infundados” y que cooperarán con la fiscalía para aclarar esta “lamentable confusión”.
Balboa Bank no respondió a pedidos de comentarios.
El regulador descartó el riesgo de contagio dada la “estabilidad y solidez” en el sector bancario y dijo que nombrará un administrador interino que tendrá hasta 60 días para presentar un plan de reconversión.
Además, la Superintendencia de Valores panameña también asumió el control de Balboa Securities, que podrá continuar operando pero bajo supervisión.
Los investigadores estadounidenses apuntan a que el denominado Waked Economic Group utilizó sus empresas para lavar dinero del tráfico de drogas empleando varios métodos, como facturación falsa y contrabando de efectivo.
El Departamento del Tesoro agregó que investiga otros seis asociados panameños y a 68 compañías ligadas a Waked, que tiene presencia en Bolivia, Colombia, Costa Rica, El Salvador y Nicaragua.