Londres (Reuters).- El cobre cayó el miércoles, dejando atrás cuatro días de ganancias, debido a que débiles datos económicos en Europa y China reafirmaron las preocupaciones por la demanda de los metales industriales, pese a los recientes esfuerzos de los bancos centrales por estimular el crecimiento económico.
El cobre a tres meses en la bolsa de metales de Londres bajó a 8,290 dólares por tonelada, respecto al cierre del martes de 8,325.50 dólares. El metal había ganado más del 2% en las últimas cuatro sesiones.
En Nueva York, el cobre para diciembre bajó casi un 0.5%, a 3,784 dólares por libra.
El metal ha estado atrapado en un rango estrecho en medio de bajos volúmenes por el cierre de los mercados chinos desde el lunes debido a una serie de feriados.
Los índices de gerentes de compra anunciados el miércoles sugieren que la zona euro volverá casi inevitablemente a la recesión en el tercer trimestre, lo que se suma a una serie de señales de que la economía global enfrenta problemas.
También hubo nuevas señales de desaceleración en el crecimiento económico de China, que representó el 40% de la demanda de cobre refinado el año pasado, al conocerse el miércoles que el índice oficial de gerentes de compra (PMI) del sector servicios cayó 53.7 puntos en septiembre, desde los 56.3 puntos de agosto.
Los precios del cobre recortaron pérdidas brevemente después de que datos mostraron que el sector privado de Estados Unidos creó más empleos de lo esperado en septiembre, con la atención del mercado pasando ahora en un esperado reporte de nóminas no agrícolas estadounidenses previsto para el viernes.
El cobre ha ganado un 9% desde inicios de septiembre y anoto máximos de cuatro meses y medio de 8,422 dólares el 19 de septiembre, alentado por la tercera ronda de alivio monetario de la Reserva Federal de Estados Unidos, la promesa de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE) y las medidas de estímulo monetario en Japón y China.