Bloomberg.- Robert Mueller y altos miembros de su equipo a cargo de la investigación sobre los esfuerzos de Rusia para interferir en las elecciones de Estados Unidos de 2016 dejaron trabajos privados donde ganaban millones de dólares representando a clientes como Apple y Facebook, según nuevas declaraciones financieras.

Mueller, un ex jefe del FBI nombrado en mayo como fiscal especial para dirigir la investigación federal, ganó cerca de US$ 3.5 millones en el bufete WilmerHale entre marzo de 2014 y mayo de este año, según su declaración financiera publicada por el Departamento de Justicia.

El documento también muestra los ingresos de Mueller de discursos, incluyendo US$ 52,000 por hablar para la subsidiaria mexicana de Citigroup, conocida como Banamex, y US$40,000 por hablar para Citibank en Rye Brook, Nueva York.

En el aspecto corporativo, Mueller representó a clientes como Facebook, Apple, la liga de fútbol americano NFL y Volkswagen AG, y reportó dos cuentas bancarias estadounidenses valuadas en hasta US$ 5.5 millones.

El formulario proporciona valores generales.

Para armar el equipo que examina si el presidente Donald Trump o alguno de sus asociados colaboraron con Rusia para interferir en la elección o cometieron otros delitos, Mueller contrató a varios colegas de WilmerHale, incluyendo a James Quarles, que reportó ingresos de alrededor de US$ 5.9 millones; Jeannie Rhee, quien citó ingresos de unos US$2 millones; y Aaron Zebley, con ingresos cotizados en cerca de US$1,4 millones.

El Departamento de Justicia no ha publicado información sobre el presupuesto para la investigación de Mueller. Los funcionarios decidirán cuánto revelar después de que el fiscal especial presente un informe sobre su gasto, lo que debería ocurrir antes del 30 de septiembre.

La investigación de Mueller se ha ampliado en las últimas semanas para incluir una evaluación de las actividades y relaciones financieras del ex presidente de campaña de Trump Paul Manafort y el yerno de Trump, Jared Kushner.

A medida que la investigación se ha vuelto más agresiva, Trump ha comenzado a cuestionar si Mueller y su equipo tienen conflictos de interés debido a donaciones o conexiones políticas con los demócratas y Hillary Clinton.

Las declaraciones financieras, publicadas después de una solicitud del Washington Post, podrían reforzar esa crítica. Sin embargo, el Departamento de Justicia revisó el trabajo anterior de Mueller y sus principales fiscales y determinó que no existe ningún aparente conflicto de interés.