Ofertas para altos ejecutivos

Clavel Garibay, directora de Marketing y Ventas de Marriott Perú
Una oferta con sabor nacional. Para albergar a las delegaciones en el marco de la Junta de Gobernadores se requiere más que una excelente planificación, atención a cada detalle. Clavel Garibay, directora de Marketing y Ventas de Marriott Perú, revela que a lo largo de doce meses de preparación la cadena optó por efectuar múltiples modificaciones: desde comprar mobiliario especial para las habitaciones hasta transformar algunas de ellas en salas de reuniones. Todo ello enfocado a facilitar, más que un descanso placentero, un ambiente propicio de trabajo. Eso sí, las muestras de cortesía tampoco quedan de lado. Tanto el JW Marriott como el Courtyard Marriott sorprenden cada noche a los altos ejecutivos con objetos típicos del país: desde artesanías hasta piezas en plata. Por supuesto, el elemento peruano está también presente en la oferta gastronómica de ambos hoteles.

Nataly Loayza, Jefa de Ventas del Hotel Los Delfines
El foco también está en los accesos. Una de las tendencias que se acrecienta cada vez más es la preocupación por ingerir alimentos saludables. Y dentro de quienes adoptan nuevas corrientes de alimentación están también altos ejecutivos. Nataly Loayza, jefa de Ventas del Hotel Los Delfines, explica así el énfasis que algunos de los huéspedes del recinto ponen en una alimentación saludable, incluso exenta de gluten. La vocera cuenta que aunque los requerimientos no son extraordinarios, sí se considera indispensable facilitarles los accesos dentro y fuera del hotel. Siguiendo esa línea, que los miembros de una misma delegación deban ubicarse en una misma planta y estar próximos a una sala de reuniones, se cuentan entre las exigencias más primordiales.

Bettina Bazán de Lama, gerente comercial de BTH Hotel
Una solicitud contra la mala suerte. Pese a que la organización para recibir a las delegaciones de la Junta de Gobernadores se remonta a hace más de un año, recién a inicios de 2014 BTH Hotel tomó conocimiento de qué grupos en específico ocuparían el recinto en el marco del evento. La confidencialidad es vital. En efecto, según cuenta Bettina Bazán de Lama, gerente comercial del hotel, la lista de huéspedes que se brindó en un inicio contenía nombres falsos, solo al momento de efectuar el registro se develaron las verdaderas identidades. Entre las exigencias más curiosas se cuenta la de la delegación china, que no quiso ninguna habitación en el piso 4, tampoco números de habitación que incluyan ese número. Los visitantes provenientes de Egipto, por su parte, solicitaron que no se incluyera ni chancho ni jamón en sus alimentos. La entrega de periódicos internacionales también se cuenta entre las principales exigencias de los visitantes.